
Porque si regalamos la misma palabra a unas y a otras sabiendo que las primeras tenian la propiedad de esta y sin importar las damos a otras estas palabras pierden su fuerza, su lustre, sus ganas. Quedan ahi, sin particularidad sin personalidad pero sobre todo sin su sabor personal. No regales palabras sin pensar bien el tipo de destinatario, podria ser que sea un atesora palabras y entonces al darle algo y luego quitarselo para soltarlo a muchos estarias cometiendo un acto de robo. Aunque en primer instancia fuesen tus palabras. Y si se necesita comunicar a muchos lo que ahora es de otro, entonces se hace una declaratoria, donde se aclara el dueño actual y nuestro nombre como co dueño. atte. Una atesorapalabras.
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