jueves, 28 de abril de 2016

Volverle a ver...



Y lo miras por un minuto, por primera vez después de mucho tiempo, lo ves tan maravilloso como la primera vez que lo viste y con ese sentimiento de felicidad de verlo pleno viene esa marea de tristeza de saber que jamás estarás en su vida y que su vida corre en una dimensión alterna a la tuya. Y por ese minuto todo ese sentimiento que alguna vez te ahogo, te ahoga de nuevo y te quedas ahí, pausada mientras termina ese minuto; mientras mueres. Al termino de ese minuto cada quien vuelve a su dimensión, tus pasos se dan solos y solo queda el recuerdo de todo eso que querías que fuera pero jamás fue.

 Y quisieras si pudieras detener el tiempo, tocar ese momento... tocarlo, besarlo; sin embargo no importa lo que hagas no se detendrá ni te corresponderá. La mirada se pierde y mientras se camina buscas la forma de no caer de rodillas y llorar.


Los amores no correspondidos son dolorosos pero son más dolorosos esos momentos donde te rencuentras todo ese dolor que pensaste dejar atrás, y cuando estas cerca de esa persona sabes que no se fue solo se mantuvo en calma esperando el estímulo correcto para volverte ahogar.

Y uno quisiera sentir ese amor que le fue negado, ese amor por que uno lucho en vano, pero todo termina en una simple conclusión, un simple NO.

No se puede, no fue, no será.. NO.

Y caminas y maldices a la suerte por atreverte a verle otra vez...De nuevo a los pasos cortos y la respiración entre cortada que anuncia una forma de contener la situación de contener al dolor.

De nuevo quedarte con las ganas de decirle cuanto le amas y el dolor de escuchar un YO NO. Te quedas ahi conteniendo la necesidad de decirle todo el significado que tiene él. Te quedas ahi pensando....