domingo, 2 de octubre de 2011

ultimamente

Últimamente me pasa como a los viejos no tengo tiempo
Últimamente me miro al espejo y no me siento
como le pasa siempre a los que carecen de cuerpo.
Me miro, miro, veo, escucho y sueño
y sin embargo nada me asegura que sigo viviendo.
Las calles están en veces vacías y el sigilo se vuelve peligro
pero cuando están llenas se vuelve el murmullo muerte.
antonio-saura
Es como si las ciudades supuraran bacterias,
todos y cada uno de nosotros somos estas bacterias; bacterias que pasean por  ella.
la ciudad se lamenta y pierde brazos,manos, dedos
Y no importa a ninguna de estas putrefactas bacterias.
Tambaleante por la infeccion que le provocamos,
camina lenta, sube la fiebre y se empeña en defenderse, en eliminarnos.
Pobre ciudad por cada uno que mata
habra 100 bichos mas que naceran para infectarla.
Bichos que se transportaran por sus venas con lentidud y soberbia.

 LOS BICHOS TAMBIEN SE LAMENTAN

Caminando es imposible escuchar los propios pasos, 
como si no solo la ciudad estuviese infectada,
como si no solo la ciudad estuviera muriendo
cada que el reloj grita las nueve, la una las siete.
Ahí vamos mudos  y a la vez  sibilantes,
ahí vamos naciendo, creciendo, procreando, llorando,
ahí vamos con la furia en la mano,
ahí mirando, muriendo, sonriendo, lastimando.
Ahí infectando.

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